Intercambio humanitario de prisioneros en Colombia y papel del DIH
Resumen editar
El Estado colombiano, tal como lo establece su carta política, tiene la obligación de velar por la libertad de todos los ciudadanos; esto independientemente de cualquier posición política. La situación de los prisioneros de guerra en poder de las FARC hace necesaria la actuación inmediata de la comunidad nacional e internacional, y es en esto que entra a tener un papel preponderante en este proceso sujetos de derecho internacional como la cruz roja, y los estados facilitadores
Artículo editar
[1] En primer lugar, hablar del intercambio humanitario de prisioneros en Colombia en el momento actual hace necesario tambìén hacer referencia al Derecho Internacional y las relaciones diplómaticas entre los paises, pues dada la complejidad y polarización de las opiniones dejan en un segundo plano la prioridad de lograr un acuerdo humanitario que garantice el regreso a casa de las personad privadas de su libertad.
Como se ha visto, ni las Farc ni el gobierno colombiano cederán en sus egos de partes en un conflicto interno, por lo que la figura de mediación y apoyo de la comunidad internacional se perfila como una de las pocas alternativas eficaces dada la importancia en el momento actual que tiene para ambas partes la imagen y apoyo de la sociedad global.
Avances importantes del papel que puede tener esta mediación imparcial entre las partes se ve en los recientemente fracasados intentos que se dio por parte de el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chavez, el presidente francés Nicolás Zarkozy, y la facilitación de la senadora Piedad Córdoba. Estas gestiones, a pesar de culminar en un infantil y antipragmático enfrentamiento entre los jefes de Estado de dos repúblicas hermanas, demostraron que en Colombia a pesar de continuar en el conflicto las partes, se pueden lograr acuerdos intermedios con fines humanitarios, uno de los objetivos del derecho internacional, menguar los efectos del conflicto dado la inevitable existencia de los mismos.
En el conflicto colombiano se debe ver que el canje de prisioneros no es algo nuevo y que en tiempos anteriores ya se ha dado, entre ellos se pueden enumerar los siguientes: - El acuerdo de Remolinos del Caguán entre el gobierno de Ernesto Samper y las FARC-EP en 1997, que permitió la liberación 60 soldados y 10 infantes de marina en poder del grupor insurgente. - Acuerdo de los Pozos que en 2001 permitió bajo el gobierno de Andrés Pastrana, la liberación de 42 policías y soldados retenidos a cambio de 15 guerrilleros presos en las cárceles del país. - Liberación el 27 de Junio de 2001 de 310 policías en La Macarena, Meta como gesto de buena voluntad por parte de las FARC en el proceso de paz. - Acuerdos entre el gobirno de Pastrana y el ELN mediante el cual recuperaron la libertad los retenidos del avión de Avianca, el kilómetro 18 y dos policías enfermos. - La liberación en navidad de 2006 de 29 policías, 10 soldados y 3 agentes del DAS por parte del ELN.
Como se ve, los presos de las FARC en las cárceles colombianas tienen la calidad de prisioneros de guerra,ya que, de acuerdo a la III convención de Ginebra, se consideran combatientes y sujetos de derecho internacional los que reunan los siguientes requisitos: 1- Que sea conocida la existencia de un movimiento organizado. 2- Que los miembros del mismo lleven un distintivo conocido. 3- Que exista un mando responsable. 4- Que sean respetadas las costumbres y leyes de la guerra.
A pesar de que las partes en el conflicto(gobierno y fuerzas insurgentes) ven este tipo de acuerdos como una carta política, la situación en el momento actual ha tomado un tinte netamente humanitario, pues por lo visto en las pruebas de supervivencia que se les incautaron a milicianos de las FARC que iban a ser entregadas en el proceso de facilitación que estaba adelantando el gobierno de Venezuela, se ve el estado deplorable y degradante en el que se encuentran los secuestrados, hecho que ha llevado a que los gobiernos del mundo se solidaricen con el caso y exijan la liberación y la concreción de un canje humanitario.
En primer lugar, se ve el esfuerzo que desde el infortunado secuestro de la candidata presidencial Ingrid Betancourt ha mantenido el gobierno francés, dado que ella cuenta con la nacionalidad del Estado europeo.
Conclusiones editar
Alumno editar
Carlos David Rodríguez Velásquez
Referencia editar
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